El incidente tuvo lugar en el hotel donde se celebró el lunes la rueda de prensa previa al combate y fue rápidamente disuelto por la seguridad.

Las imágenes compartidas en Twitter mostraban a John Fury enfrentándose cara a cara con un hombre que vestía un chándal del equipo de Usyk antes de golpearle con la cabeza.

Más tarde se vio al padre del púgil, de 59 años, con un corte en la frente y dos chorros de sangre cayéndole por la cara, a ambos lados de la nariz.

En declaraciones posteriores a Sky Sports, John Fury declaró: "Le estaban faltando al respeto a mi hijo, el mejor peso pesado que se ha puesto unos guantes de boxeo. Salieron con toda esa basura, en mi cara, intentando hacerse los listos. Entrando en mi espacio, 'Usyk, Usyk', nadie se está molestando con ellos, yo sólo estaba coreando el nombre de mi propio hijo.

"Así que se acercaron más y más, y al final soy un guerrero, eso es lo que hacemos. Si entras en ese espacio, vas a recibir lo que te mereces".

Su hijo, Tyson Fury, no estaba presente cuando se produjo el incidente.

"No vi nada, estaba en la habitación haciendo entrevistas, pero no estoy aquí para todo eso, estoy aquí para hacer el trabajo e irme a casa y descansar", dijo el titular de peso pesado del Consejo Mundial de Boxeo.

Las autoridades saudíes dijeron que por el momento no se han presentado cargos en relación con el incidente.