En un comunicado, la RFEF valora en especial la "colaboración activa" del Atlético de Madrid, que apeló el cierre parcial del Cívitas Metropolitano para los dos próximos partidos y una multa de 20.000 euros tras este incidente, que tuvo lugar durante el partido correspondiente a la jornada 33 de LaLiga EA Sports.

Nico Williams escuchó imitaciones del sonido del mono dirigidos hacia él en la derrota por 3-1, un resultado casi definitivo en la lucha por la cuarta plaza. El duelo tuvo que ser interrumpido varios minutos tras la conversación entre jugador y árbitro.

El autor de esos actos fue identificado gracias a las cámaras presentes en el estadio y puesto a disposición policial tras el choque. El Atleti, además, le retiró su abono.

En su resolución del jueves, Apelación celebra la rápida condena del club de unos actos descritos así por la propia institución: "Incidente aislado protagonizado por un solo sujeto (...) y no por un colectivo indeterminado".

Pese a los esfuerzos de las instituciones, que ahora señalan cada caso a las autoridades y multiplican las campañas de comunicación, España sigue teniendo problemas para erradicar el racismo de sus estadios, donde el brasileño Vinicius Júnior es a menudo víctima de insultos.